En este artículo invitado, Lauren Galietti, Vicepresidenta de Marketing de AssetWorks, comparte consejos para vender tu empresa sin un agente o asesor de fusiones y adquisiciones.
Al igual que un agente inmobiliario puede ayudarte a vender tu casa, trabajar con un corredor de fusiones y adquisiciones puede aliviar la carga que supone vender tu empresa. Sin embargo, no es necesario trabajar con un agente inmobiliario para vender tu casa, ni tampoco es necesario trabajar con un corredor para vender tu empresa. Si estás pensando en colgar ese cartel de «Se vende por el propietario», aquí tienes algunas estrategias que pueden ayudarte a navegar con éxito por el proceso de fusión y adquisición sin un agente.
Antes de buscar compradores: Construye y aprovecha tu red
Una de las ventajas de trabajar con un intermediario es el acceso a su red de posibles adquirentes. Carecer de una red sólida puede ponerte en desventaja a la hora de buscar adquirentes, pero es un obstáculo que puede superarse. Si tu empresa es todavía una start-up, existen recursos específicos para ti. Muchas ciudades tienen programas aceleradores o incubadoras para líderes tecnológicos que pueden ayudarte a crear una red de colaboradores y posibles compradores. Tanto para las empresas de nueva creación como para las más consolidadas, una forma estupenda de crear tu red es recurrir a Internet. Dedica algún tiempo a buscar empresas que hayan adquirido empresas como la tuya en el pasado. Establece contactos con compradores a través de redes sociales como LinkedIn y ponte en contacto con ellos para iniciar la conversación.
Compradores de suministros: Crear un Memorándum de Información Confidencial (MIC)
Otro elemento del proceso de venta en el que un corredor puede resultar útil es en ayudarte a crear un Memorándum de Información Confidencial (o CIM). Éste es el documento que utilizarás para comercializar tu negocio a tu red recién establecida. Un CIM incluye información sobre tu solución, el mercado al que sirves, tu entorno competitivo y tu base de clientes y tasa de desgaste, junto con información financiera histórica y proyecciones futuras. Para más información sobre los CIM y una lista de comprobación de lo que debes incluir, haz clic aquí.
Elegir un comprador: Encuentra la mejor opción
¿Buscas simplemente la oferta más alta? ¿Buscas un lugar donde tu empresa pueda seguir creciendo en el futuro? ¿Piensas dejar el negocio o buscas nuevas oportunidades de crecimiento para ti y tus empleados? Tómate tu tiempo para determinar qué es lo más importante para ti y en qué tipo de entorno crees que prosperará tu negocio. Después, vuelve a aprovechar la red que has construido y la CIM que has creado para empezar a fomentar tus conversaciones y a construir relaciones.
Cerrar el trato: Recurre a la ayuda de un experto jurídico
Elementos como la propiedad intelectual, los acuerdos contractuales y la estructura de la operación significan que habrá mucho que discutir con tu adquirente antes de llegar a un acuerdo. Cuando creas que has encontrado lo que mejor se adapta a ti y a la empresa que has creado, recurre a la ayuda de un profesional jurídico con experiencia en fusiones y adquisiciones para que te ayude a cerrar el trato.